La Torre de la Mitja Lliura en Alicante, también conocida como Torre de la Media Libra, es una torre señorial del siglo XVI ubicada en la zona de huerta de La Condomina. Se encuentra en el Camino del Ciprés, adosada a una vivienda particular. Es una de las "Torres de Huerta", fortificaciones con un gran interés cultural e histórico de Alicante.
Ubicación y características
Dirección: Camino del Ciprés, nº 84, en la partida de la Condomina de Alicante.
Descripción: Es una torre de planta cuadrada con la base en talud, compuesta por dos pisos. Su origen data de la segunda mitad del siglo XVI.
Propiedad: Actualmente es de propiedad privada.
Toponimia e historia
Origen del nombre: Recibió el nombre de "Mitja Lliura" (Media Libra) por el apodo de un antiguo propietario que la mantuvo hasta 1954.
Contexto histórico: Forma parte de la red de torres defensivas construidas en la huerta alicantina para protegerse de los ataques corsarios durante el siglo XVI

Las Torres de la Huerta de Alicante son un sistema de vigilancia y defensa de los siglos XVI y XVII, construido para proteger la rica huerta de los ataques de piratas berberiscos. Este conjunto de torres, como las de Torre del Conde, Boter, Reixes o la Torre Cacholi estaban conectadas por señales visuales y acústicas, y existían diferentes tipos: las de vigía en la costa, las de refugio en el interior, y las de defensa con elementos artilleros. Se pueden descubrir y recorrer mediante una ruta cultural y natural por la zona.
Propósito y Funcionamiento
Vigilancia y Alerta:
Las torres de vigía, situadas en la costa, tenían el objetivo principal de detectar la llegada de barcos enemigos y dar el aviso rápidamente a otras torres y poblaciones cercanas.
Refugio y Defensa:
Las torres de refugio, más cercanas a los núcleos de población, servían como lugar seguro para que los habitantes se resguardaran durante los ataques, mientras que las torres de defensa, además de refugio, contaban con elementos como almenas, aspilleras y troneras para repeler a los atacantes.
Sistema de Comunicación:
El sistema se basaba en la comunicación visual y sonora entre las torres, utilizando señales de humo, campanas o artillería para alertar de los peligros.
Tipos de Torres
Torres de vigía: Situadas en la costa para vigilar la llegada de naves hostiles.
Torres de refugio: Más al interior, destinadas a dar cobijo a la población.
Torres de defensa: Combinaban la función de refugio con la capacidad de atacar, con elementos defensivos en su estructura.
Ubicación y Legado
Distribución:
Se localizan en la huerta alicantina, cerca de antiguos caminos que comunicaban la zona con el resto del Reino de Valencia.
Patrimonio:
A pesar de los siglos, aún se conservan varias de estas torres, que hoy forman parte del patrimonio histórico y cultural de Alicante.
Ruta de las Torres:
Existe una ruta para recorrer a pie o en bicicleta, que permite adentrarse en esta parte de la historia y conocer estas construcciones.
Ejemplos de Torres:
Algunas de las torres más conocidas son la Torre de Aguilas, la Torre de Boter, la Torre Juana y la Torre Reixes, entre otras.

Las torres de vigilancia de la Huerta son una serie de Torres Vigía construidas en el siglo XVI en las costas del sur de España para defenderlas de los ataques de los Piratas Berberiscos.
Los piratas berberiscos, el terror del mediterráneo.
Los habitantes del Mediterráneo vivieron durante siglos bajo el terror de los piratas y corsarios berberiscos, que desde el norte de África atacaban los barcos cristianos para obtener botín, esclavos o rescates.
La táctica con la que contaban los piratas de Berbería era simple y efectiva para desbaratar cualquier defensa móvil enemiga. En pequeños grupos de alrededor de tres *** fustas (pudiendo ser más para presas mayores) se dirigían a la costa, consiguiendo amparo nocturno en calas amagadas o, directamente, atacando la playa. Desembarque rápido, saqueo de las inmediaciones (cuando no incursionaban al interior) y captura de todo cristiano que encontrasen para venderlos como esclavos después. En menos de una jornada ya contaban con el botín labrado y podían retirarse antes de que llegase cualquier tipo de socorro español como las milicias urbanas o galeras.
*** Una fusta era una embarcación estrecha, ligera y rápida, de poco calado, impulsada por remos y vela, en esencia, una pequeña galera. Normalmente tenían bancos de remo a cada lado, de entre 12 y 18 hombres, un solo mástil con una vela latina (triangular).

Una fusta era una embarcación estrecha, ligera y rápida, de poco calado, impulsada por remos y vela, en esencia, una pequeña galera. Normalmente tenían bancos de remo a cada lado, de entre 12 y 18 hombres, un solo mástil con una vela latina (triangular) y normalmente llevaba dos o tres cañones. La vela se utilizaba para travesías y ahorro de fuerzas de los remeros, mientras que los remos propulsaban la nave dentro y fuera de puerto y durante los combates.
Fusta fue el nombre genérico que recibían toda clase de embarcaciones en la Edad Media, aunque ya en el siglo XV formaban una familia particular de embarcaciones de remo. A veces también se les llamaba galeota, aunque éstas solían tener dos mástiles.
Su velocidad, movilidad, capacidad de moverse sin viento, y su habilidad para operar en aguas poco profundas crucial para esconderse en las aguas costeras antes de asaltar a los barcos que pasaban hacían que fueran ideales para la guerra y la piratería. La fusta fue el barco favorito de los corsarios del norte de África de Salé y la costa de Berbería. También principalmente con fustas los hermanos Barbarroja, Baba Aruj y Jayr al-Din, llevaron a cabo la conquista turca del norte de África y el rescate de los mudéjares y moriscos de España después de la caída de Granada. Ellos, y los demás corsarios norteafricanos, causaron terror en las flotas cristianas y en las islas y zonas costeras del Mediterráneo con embarcaciones de este tipo en los siglos XVI y XVII.

Simulación por ordenador de un grupo de piratas tras el saqueo
Los piratas berberiscos, el terror del mediterráneo.
Los habitantes del Mediterráneo vivieron durante siglos bajo el terror de los piratas y corsarios berberiscos, que desde el norte de África atacaban los barcos cristianos para obtener botín, esclavos o rescates. En menos de una jornada ya contaban con el botín labrado y podían retirarse antes de que llegase cualquier tipo de socorro español como las milicias urbanas o galeras.

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Una aspillera defensiva es una abertura vertical, estrecha y profunda, practicada en muros, murallas y torres para permitir a los defensores disparar flechas o proyectiles con un arco o ballesta, manteniéndose protegidos. Estas aberturas suelen ser más anchas en el interior para dar más rango de tiro y, en el caso de las ballestas, a veces tenían forma de cruz.
Distintos tipos de Aspilleras
Características principales
Forma: Generalmente vertical, horizontal o de forma libre y estrecha en el exterior, pero se ensancha hacia el interior (con un ***"derramado") para ofrecer al tirador un campo de visión y disparo más amplio.
Función: Permite disparar a cubierto del enemigo, utilizando armas arrojadizas como flechas o proyectiles de ballesta.
Ubicación: Se encuentran en muros y torres de castillos y fortalezas.
Tipos: Además de las verticales, existen aspilleras horizontales o apaisadas. Si son más anchas por fuera que por dentro, se llaman "invertidas".
Armamento: Su diseño evolucionó con el uso de diferentes armas; por ejemplo, el uso de la ballesta impulsó la aparición de aspilleras cruciformes.
Torre Defensiva de Volumen Prismático es una estructura de defensa con una forma tridimensional de prisma, como un cubo o un prisma rectangular, y se usaba para vigilancia y protección. Estas torres a menudo se construían con planta cuadrada o casi cuadrada y tenían varios niveles, a veces con una base piramidal para mayor estabilidad. Ejemplos incluyen las torres de vigilancia medievales o árabes, construidas con materiales como piedra y mortero.
Características principales
Forma de prisma: Su volumen principal tiene la forma de un prisma, como un cubo o un prisma rectangular.
Planta cuadrada o casi cuadrada: La base de la torre suele ser de forma cuadrada o con una ligera aproximación a un rectángulo.
Múltiples niveles: Se elevan en altura, divididas en diferentes plantas o alturas para diferentes funciones.
Base piramidal: Algunas pueden tener una base de volumen piramidal truncada para ofrecer mayor estabilidad.
Materiales de construcción: Tradicionalmente se construían con materiales resistentes como piedra y mortero.
Función: Sirvieron como puntos estratégicos para la vigilancia y defensa, a menudo como parte de un sistema de fortificación más amplio.
Simulación de una imagen nocturna de la Torre Mitja Lliura con una hoguera encendida en lo alto para avisar a las otras Torres de un peligro inminente
Las torres vigía avisaban de la llegada de piratas mediante un sistema de señales de humo durante el día y de hogueras por la noche
Cada torre se comunicaba con la siguiente en una cadena, usando un código de señales (por ejemplo, levantando las hogueras tantas veces como barcos avistaran) para transmitir la información a lo largo de la costa y a las localidades.
Sistema de comunicación
Durante el día: Se utilizaban señales de humo para alertar de un ataque.
Durante la noche: Se encendían hogueras.
Código de señales
La cantidad de hogueras o el tiempo que permanecían encendidas indicaban el número de naves enemigas.
Aviso continuo: Si el ataque ya había comenzado, la humareda o la hoguera se mantenía de forma continua para indicar el desembarco.
Comunicación en cadena: Las torres se comunicaban entre sí. Al avistar un peligro, la torre emitía la señal, que era replicada por la torre siguiente, extendiendo la alerta a través de toda la costa.
El conjunto arquitectónico de la casa-torre Mitja Lliura (también conocido por La Granja) está constituido por dos elementos separados: torre y casa. La torre se ubica en el interior de una pequeña parcela anexa a otras en las que se levanta un conjunto de casas entremedianeras, definiendo un caserío rural. La primitiva casa con anexos se emplaza en la parcela contigua a la de la torre. Ambas parcelas recaen a una vereda que parte hacia el oeste desde el camino de la Playa de San Juan. Ambos edificios, en la actualidad, se usan como viviendas independientes ya que la torre, aunque reformada, incorpora en su base una casa que nada tiene que ver con el conjunto histórico, cuya datación puede fecharse en el siglo XX. En el frente de las parcelas existe una pinada y un grupo de palmeras que pertencen al antiguo jardín o patio anterior. Torre: De planta rectangular y volumen prismático, se eleva desde el suelo sobre un plinto troncopiramidal, de perfil recto en su frente oeste. Está exenta y separada respecto de la casa, con sus fachada orientadas a este y sur. Presenta 4 niveles, con el inferior en semisótano, empotrado en el plinto. Cuenta con dos accesos en arco de ½ punto en el frente oeste que parecen originales: uno en el basamento y otro en el piso primero. En sus lienzos se abren huecos primitivos, de pequeñas dimensiones, y otros mayores de cronología posterior. En la base se adosa una vivienda de planta baja. La cubierta es plana, transitable y accesible desde la escalera de caracol que sale al exterior con una torreta. La torre presenta un remate recto, sin cornisa ni almenas. Sus muros son de fábrica de sillarejo con sillería en las esquinas y huecos. Casa y anexos: De planta rectangular, con dos niveles y tres crujías. El inferior está conformado por el amplio vestíbulo, con dos huecos adintelados, y otras dependencias como la cocina. La fluidez espacial desde el arco de entrada de la puerta hasta el patio trasero es apreciable desde el exterior. Esta planta cuenta con la bodega, al fondo, y los establos, en un lateral. En la planta superior se encuentran las habitaciones. Los volúmenes prismáticos del exterior, conformados por planos inclinados de teja están alterados por la presencia de alguna terraza plana, resultado de alguna reforma. La casa está habitada aunque su estado de conservación no es muy bueno.
Jardín: No se mantiene la estructura del hipotético jardín. En el interior de las dos parcelas se levantan palmeras y una higuera. En los maérgenes de los caminos de acceso existen olivos, algarrobos, palmeras y una masa de pinos, todos los cuales pertenecen al antiguo jardín y patio. La casa-torre Mitja Lliura se ubica en el margen oeste de una vereda que parte del camino de la Playa de San Juan. Formaba parte del grupo de casas-torre que jalonaban este camino, como las Águilas (04), Santiago (05), Sarrió (06) y El Ciprés (07). El acceso hacia la casa desde el camino se practica por la parte delante de la misma. Desde aquí partía un camino, casi ortogonal, hacia el este, flanqueado de palmeras y con una pinada; estos ejemplares y otras junto a la casa y la torre puede que pertenezcan al antiguo jardín o patio anterior. Los campos de la casa-torre Mitja Lliura eran regados con el agua procedente del “Brazal de San Roque” (Varela, 1983). Aunque se carece de datos precisos, la torre puede datarse a finales del s. XVI o principios del s. XVII y las partes más antiguas de la casa de las mismas fechas o algo posterior. No obstante, la casa debe ser del XVII con añadidos y reformas en los siglos posteriores. Las evidencias parecen apuntar que casa y torre han constituido siempre dos edificios exentos aunque interiores a una misma parcela (hoy convertidos en dos propiedades). Ambas construcciones han sido reformadas seguramente a mediados del siglo XX, cuando se debieron abandonar los cultivos. A la torre se le suprimió el acceso exterior en esaclera longitudinal hasta el primer piso por el lado norte que recaía a la parcela de la casa. La casa, por otro lado, cuenta con distintas reformas como el balcón de forja sobre el arco de entrada. En esta se mantiene el vestíbulo primitivo, con trtes vanos y gran espacialidad, del cual se pasa a la bodega. El uso inicial de caseros ocupando la planta baja y señores en la superior ha sido alterado y la actual familia ocupa la totalidad de la casa: zona de día abajo y zona de noche arriba. La tipología se mantiene con anexos agrícolas ahora en desuso.
Bibliografía y fuentes: Seijo (1979); Calduch (1979); Varela (1983, 1995), López (1995); Jaén (1999); Ruiz (1999).
Exmo. Ayuntamiento de Alicante
















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